viernes, 9 de septiembre de 2011

Crítica The Tree of Life



Ya he tenido el ¿gusto? de ver The Tree of Life de Terrence Malick, un largometraje MUY particular, no convencional, de digestión lenta y que aporta un obligado ejercicio de interpretación por parte del espectador haciéndolo participe de la pieza para así completarla y alcanzar el nivel de obra de arte.

Recomendación
Estaría bien que el espectador vaya preparado el cine, sobre todo en este caso, es extremadamente cine de autor, de interpretación, no es un film sencillo de seguir, hay que ir despierto, con mucha paciencia y con la mente abierta.

Dirección
Creo que Malick se da con el gusto de hacer cine, completamente, en este film la poesía en imágenes secuenciadas es total y hasta tal punto que pareciera que buscase excusas para relacionarlas al hilo de la historia, por lo que está de más decir que la fotografía, los encuadres y el montaje son exquisitos.

Actuación
En cuanto a los actores, particularmente me ha gustado mucho, y voy a hablar de tres casos, Brad Pitt, Sean Penn, y el niño Hunter McCracken.


Pitt es un caso extraño me parece un buen actor, pero con poco criterio a la hora de elegir sus proyectos, pero The Tree Of Life es uno de esos casos en los que un actor no solo queda en evidencia, sino que si es bueno puede disfrutar del papel y sacar su excelencia. En esta película Brad Pitt realiza su profesión de una forma soberbia, y prueba de ello es que durante el film deja de existir Brad Pitt para darle lugar a su personaje.

Así como el anterior tiene poco criterio para elegir, creo que Sean Penn, es el caso completamente contrario, y queda claro que en una película como The Tree of Life es del tipo de proyectos que Sean espera, invisibles las cámaras captan sus emociones casi sin palabras, un actor al que no le faltan palabras para expresarse.

Debo hacer una mención especial a los niños sobre todo a Hunter McCracken y supongo que a Terrence por saber hacerlo bien con ellos, pero a pesar de la corta edad de los personajes, pareciera que el director puso una cámara en la vida de una familia, pareciera que los niños no actúan, simplemente viven sus vidas sin darse cuenta que están siendo observados por nosotros, con sus juegos, sus alegrías, sus tristezas, sus miedos … en muchos casos el espectador se podrá sentir identificado y esto es un logro que no cualquier director consigue. 

Conclusión
Desconozco si este es el proyecto más importante para Malick, pero su ambición por atrapar la esencia de la vida en una película es evidente, desde lo más grande, hasta los detalles mas pequeños sin importancia, sin dejar de lado las sensaciones y los sentimientos, todo esto regalándonos una postura de observadores invisibles, testigos de un todo resumido en un film.

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